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08. Maldivas
Debajo de la imagen perfecta de postal de las Maldivas se esconde una historia de angustia medioambiental.
Esta isla paradisíaca, frecuentada por nada menos que 1,2 millones de turistas cada año, se enfrenta a un problema importante: la basura.
Lamentablemente, las Maldivas carecen de la infraestructura de gestión de residuos necesaria, lo que provoca que la basura se envíe a las islas cercanas, transformándolas en vertederos enormes y antiestéticos.
Esta práctica tiene consecuencias nefastas para la flora y fauna local. Los trabajadores de estos lugares soportan duras condiciones sin el equipo de protección adecuado.
Para agravar el problema, algunos de los desechos terminan en el mar circundante, lo que daña el delicado ecosistema acuático de las Maldivas.
Las Maldivas son un ejemplo conmovedor de lugares arruinados por el turismo, que muestra los desafíos que supone equilibrar la belleza natural con las visitas masivas.