18. Exfoliante corporal con posos de café

Usar un exfoliante corporal a base de café molido una o dos veces por semana puede ayudar a mantener una piel saludable y radiante. La textura gruesa de los posos de café los convierte en excelentes exfoliantes, ya que ayudan a eliminar las células cutáneas muertas, la suciedad y las impurezas, dejando la piel más suave y tersa.

El café también contiene antioxidantes, que tienen propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a aliviar y calmar la piel irritada o inflamada.

Para utilizar el café como exfoliante corporal, hay que dejar que los posos se enfríen y se sequen después de preparar el café. Luego, se combinan los posos de café con un aceite portador, como aceite de oliva, aceite de coco o aceite de almendras dulces, para crear una consistencia pastosa y se aplica sobre la piel durante la ducha, con movimientos suaves.

Después de la exfoliación, aplica una crema humectante para mantener tu piel suave y tersa.